jueves, 12 de agosto de 2010

♞ "Tu infinita belleza"



Como recuerdo tu suave aroma,
que inundo de amor 
mi corazón; 
con tus curvas suaves, y pronunciadas.... 
tu infinita belleza, 
que trajo a mi la ilusión.



Como recuerdo tu suave aroma, 

que inundo de amor mi corazón; 
con tus curvas suaves, y pronunciadas.... 
tu infinita belleza, 
que trajo a mi la ilusión. 


Los torogoces con su canto, 
cómplices desde los árboles 
nuestra pasión velaban; 
y allá de cuando en cuando, 
ante nuestros gemidos.... 
los tímidos venados 
igual, espantaban. 






Innumerables veces en ti sudé; 
y tu siempre presta, 
con la suavidad de la brisa me secabas; 
o serena en la noche, 
mi cuerpo cansado en ti reposé; 
y siempre amorosa me recibiste.... 
mi bien amada. 



Hoy albergo en mi la esperanza,
de algún día sin tardanza.... 
poder volver a verte; 
camino que siempre me espera, 
desde Cacaopera, 
pasando por el Cerro Cacahuatique.... 
hasta el Cantón La Labranza. 


♞ 
Sir Galahanth 
<Autor> 

*Derechos Reservados* 
Silvia Regina Cossío Cámara


martes, 10 de agosto de 2010

♞ "No pasarán"



Quiero narrarles a mis amigos

una historia....

que si fiel, me es aun la memoria;

sucedió una noche de invierno del 84.

                                                                                 
Para ese entonces la BRAZ 

ya se había dividido en dos,
y venía bajando de Tenancingo...
a un lado el río Quezalapa, 
y las estribaciones del monte 
San Juan.... a la par.



Ese invierno había sido 
especialmente 
inclemente,
el hambre y el cansancio...
por momentos  hacia flaquear.
Los combates contra el Ejercito
habían sido duros, 
y para colmo de males...
nos topamos con el recién estrenado
Batallón Atonal.


Esa noche se entablo un raro
y singular combate, 
y el ejercito con sus luces...
parecían espantar.... hasta la oscuridad.
Las miles de trazadoras, de sus armas
eran como finos dedos 
de la mano de la muerte,
y la tercera parte de la fuerza...
con un susurro 
llego esa noche a sustraer.




De tal manera
que al amanecer del siguiente día,
la única melodía que se escuchaba era
un silencio sepulcral; 
la fuerza armada se preparo
para aniquilarnos...
en un asalto final.




Entonces escuchamos
una voz entrecortada en nuestras filas,
que mas que gritar una consigna...
parecía mas, una ultima plegaria 
u oración. 


¡¡¡ No pasaran !!!


Se escucho primero como un murmullo...
que fue creciendo entre nosotros
como un arrullo...
hasta llegar a la convicción.





Al final de ese sangriento día,
nuestra tristeza se transformo en alegría;
y el Batallón de Infantería de Reacción Inmediata Atonal...
conoció por primera y ultima vez ,
al Batallón Rafael Arce Zablah.... 
popularmente conocido... como 
La BRAZ.




Todo comenzó,
con un canto que suavecito y muy claro
a esos perros les decía.... 


¡¡¡ No pasaran!!!







Samuel




♞ 
Sir Galahanth
< Autor >


*Derechos Reservados* 
Silvia Regina Cossío Cámara